Buscando lo espiritual para vivir en el Espíritu.
Colosenses 3.1
Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.
Estamos llamados a buscar las cosas de arriba.
¿Cómo esto puede ser posible?
Nuestro lugar de reunión debe ser específicamente lugares donde se nos enseña esto y se nos oriente en esto.
¿Qué pasa si es todo lo contrario?
Será más complicado vivir este llamado de vivir alimentando el espíritu y no la carne. En Romanos 13.14
Dice: sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne.
El mejor lugar para establecer lo espiritual es el lugar donde nos reunimos como Iglesia. Es como equiparnos para llevar lo aprendido a la práctica a nuestros hogares. Pero tristemente estamos tratando de ser tan divertidos como los negocios de entretenimientos.
En nosotros debe ir muriendo la obra de la carne, pero esto nunca será posible sino hay una diferencia entre lo santo y lo profano. En Romanos 8.13 Dice: porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis.
Colosenses 3.5–8
5Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría; 6cosas por las cuales la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia, 7en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas. 8Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.
Este tema no es de los legalista. Es un asunto real que todos debemos entender. El fracaso de mucho consiste en que prefieren alimentar la carne que la vida del espíritu. Nuestras congregaciones se ven afectadas con ideas humanistas que levante el Ego de las personas para tener su asistencia.
Dejamos de ser iglesia cuando perdemos el verdadero propósito de nuestra reunión .
Que Dios nos ayude a que nuestro lugar de reunión sea para fortalecernos en el Espíritu y sea el lugar de la muerte a lo terrenal.
Pastor Abraham Luciano
Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.
Estamos llamados a buscar las cosas de arriba.
¿Cómo esto puede ser posible?
Nuestro lugar de reunión debe ser específicamente lugares donde se nos enseña esto y se nos oriente en esto.
¿Qué pasa si es todo lo contrario?
Será más complicado vivir este llamado de vivir alimentando el espíritu y no la carne. En Romanos 13.14
Dice: sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne.
El mejor lugar para establecer lo espiritual es el lugar donde nos reunimos como Iglesia. Es como equiparnos para llevar lo aprendido a la práctica a nuestros hogares. Pero tristemente estamos tratando de ser tan divertidos como los negocios de entretenimientos.
En nosotros debe ir muriendo la obra de la carne, pero esto nunca será posible sino hay una diferencia entre lo santo y lo profano. En Romanos 8.13 Dice: porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis.
Colosenses 3.5–8
5Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría; 6cosas por las cuales la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia, 7en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas. 8Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.
Este tema no es de los legalista. Es un asunto real que todos debemos entender. El fracaso de mucho consiste en que prefieren alimentar la carne que la vida del espíritu. Nuestras congregaciones se ven afectadas con ideas humanistas que levante el Ego de las personas para tener su asistencia.
Dejamos de ser iglesia cuando perdemos el verdadero propósito de nuestra reunión .
Que Dios nos ayude a que nuestro lugar de reunión sea para fortalecernos en el Espíritu y sea el lugar de la muerte a lo terrenal.
Pastor Abraham Luciano